Rumbo al objetivo:
Cuando la persona intenta alcanzar el objetivo de transformar su vida, está haciendo exactamente lo que Dios quiere. La persona une su voluntad a la de Él, porque Dios quiere hacer el cambio, pero esto es posible cuando la persona se entrega de cuerpo, alma y espíritu, cuando la persona coloca toda su fuerza en este propósito.
A veces la persona no está en pecado, pero dentro de ella reina la ansiedad. Si esta ansiedad es grande, mediana ó chica, no importa, pues viene del diablo. Si esto ha sucedido dentro de ud. ore a Dios inmediatamente, para que Él arranque esta ansiedad de dentro de ud, a fin de transformar en una nueva persona.
Ignore lo que le dictan las emociones, cuando el pecado esté a la puerta sepa decir no, huya de él, a fin de cuentas estamos buscando en estos días ser renovados y purificados, aléjese de los malos pensamientos!
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