"Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor". 2º Timoteo 2:22
Confiar en Dios es seguir en contra de ese mundo, desviándose de las malas amistades y creyendo que Dios está con nosotros en cualquier situación.
Por eso, nuestra
comunión y confianza en Dios son actitudes personales y no es una buena idea
seguir consejos de nuestros amigos sólo para agradarles.
La solución es huir de esos consejos que no
siempre son buenos para nosotros y mantener nuestra mente concentrada en los
consejos de Dios, pidiendo a Él coraje para seguir adelante sin desviar a
ningún lado!
Si nos quedamos cerca de
esas malas amistades, aunque la gente no haga lo que hacen, tarde o temprano
nos vamos a hacer víctimas de las cosas que ellos hacen, entonces no vale la
pena desagradar a Dios, que es nuestro Súper Padre, para agradar a un amigo que
puede estar preocupado solamente por sus intereses. ¡Piensa en eso!
0 comentarios
Publicar un comentario